Cibertimos que intentarán hacerte este verano
En verano nos relajamos, tenemos ganas de descansar y de recargar pilas tras todo un año de esfuerzo. Pero, por otro lado, nos asalta un nuevo estrés: el de las amenazas vacacionales: a que entren en nuestra casa ahora que no estamos, a ser objetivo de un carterista experto en turistas, ¡y como ya es tradicional, a los ataques cibernéticos!
Estos últimos, si bien no suelen ser estacionales, sí que pueden variar de tipología y apariencia según la época y las circunstancias. Así que tengamos cuidado, ahora especialmente, con esos ‘chollos demasiado buenos para ser verdad’ (como el famoso cheque de 500€ para gastar en Amazon), con el uso de las tarjetas de crédito en lugares dudosos y con la navegación en sitios o wifis públicos.
Sin embargo, los hackers, que tienen una capacidad infinita a la hora de innovar para hacer el mal, cada vez hacen “campañas” de ciberataques más personalizadas y adecuadas a cada época del año.
Los nuevos cibertimos con los que deberás tener cuidado estas vacaciones:
Uso de plataformas de ecommerce para saber si estás en casa
Puede que tu dirección ya haya sido identificada mediante ingeniería social o robo de datos personales. En ese caso, los delincuentes solo tienen que tratar de contactar contigo mediante estas plataformas de ecommerce como Wallapop, Milanuncios, o cualquier otro site o app en la que se puedan comprar y vender productos o servicios (venta de segunda mano de coches, de viviendas) donde tengas un perfil y tratar de ‘quedar’ para una interacción física y comprobar así si estás en el domicilio o fuera de vacaciones. “Trata de ofrecer siempre respuestas evasivas en estos casos, sobre todo, si estás de verdad fuera de casa, para evitar confirmarlo”, recomienda Lambert.
La policía te acusa de tener pornografía infantil
Este verano vuelve este ya clásico engaño en el que recibes una comunicación en la que los ciberdelincuentes se hacen pasar por autoridades como la Policía Nacional o la Guardia Civil acusándote de haber detectado contenido digital ilícito en tu ordenador. Normalmente adjuntan un documento en el que te piden que ‘justifiques tus actos’, y el objetivo, una vez lo tienen en su poder, suele ser la extorsión y el chantaje. Lo mejor es no responder (recuerda que las autoridades nunca actuarían de este modo), para dar las menores pistas posibles sobre si la cuenta está en realidad activa.
Un metaverso cada vez más poblado
Poco a poco las realidades extendidas, precisamente, se extienden. Es toda una nueva red, aún muy nueva, en la que de nuevo somos vulnerables, ya que tanto nuestros datos como nuestro comportamiento en las mismas pueden ser muy reveladores para atacantes que, al igual que en otras redes sociales, pueden ocultarse fácilmente tras convincentes avatares. La propia Interpol está ya vigilante y alerta ante los nuevos tipos de cibercrimen y scamming que pueden darse aquí.
Los ciberdelincuentes saben bien que en vacaciones la inmensa mayoría de nuestras conexiones a Internet son a través del móvil, y por ello se sirven de la Inteligencia artificial para elaborar engaños cada vez más efectivos
Algunos reclamos habituales
Los malhechores buscan siempre argumentos que nos atraigan hacia esas páginas donde podrán obtener nuestros datos y acceder así a nuestro ordenador, nuestras aplicaciones o nuestras finanzas. En época de vacaciones, claro, estos argumentos tendrán que ver con una reserva de hotel que plantea problemas, un cambio de fecha de tus vuelos o una alerta de seguridad del sistema de vigilancia doméstico.
Muchas veces no tendremos una reserva de hotel o de avión, o quizá estemos en casa, así que no habrá duda de que esos correos maliciosos son falsos. En esos casos solo hay que borrarlos directamente para evitar el ‘peligro’. Sin embargo, en otros puede haber dudas. Una pista importante sobre su veracidad es fijarnos en la dirección de correo remitente, ahí nos daremos cuenta de que puede ser falso.
Pero no solo eso. Además de todo ello, recordemos otras amenazas que pueden acecharnos al otro lado de la pantalla, como pueden ser las aplicaciones para conocer gente o establecer relaciones, que pueden ser utilizadas por los malhechores para atraer a víctimas incautas y robarles o algo peor (esto nos puede suceder en nuestra ciudad, claro, pero estaremos más desprotegidos si nos encontramos en un entorno extraño, con otro idioma, etc.); o los correos o llamadas de supuestas compañías de revisión del gas, el agua, etc, que puede que no estén más que intentando saber cuándo estaremos en casa y cuándo fuera de ella.