Trucos para crear contraseñas seguras y fáciles de recordar

 

A partir de una frase

Piensa en una frase que tenga algún significado para ti y, a ser posible, para nadie más. Que no sea ni muy corta, para que sea difícil de adivinar, ni muy larga, para que la puedas recordar fácilmente. Si tienen mayúsculas y números, mejor. Si hay algún símbolo, magnífico. “En el bar de Juan ponen tapas grandes a 3 euros”, por ejemplo. Ahora coge las primera letra de cada palabra y te sale “ElbdJptga3€”, que es una buena contraseña. ¿A ti no se te ocurre nada? Tranquilo, el título de tu canción favorita puede ser un punto de partida.

Convierte las vocales en números

Es un truco bastante popular que los ciberdelincuentes ya conocen y sortean, pero que puede funcionar muy bien para complementar alguno de los otros sistemas. Retomando el ejemplo del punto anterior, nuestra clave provisional “BMiegcohteerso” se convierte en otra un poco más segura: “BM13gc0ht33rs0”. Añadiendo uno o varios símbolos podría utilizarse.

Sin vocales

En lugar de reemplazarlas por números como en el ejemplo anterior, podríamos eliminar las vocales por completo. Si además partimos de un término inventado, como nuestro “BMiegcohteerso”, la contraseña resultante será más robusta: “BMgchtrs”. Cualquier parecido con una palabra real es pura coincidencia, pero recuerda añadir números, mayúsculas y símbolos antes de emplearla.

 

Una palabra y un número mezclados

Es fácil, pero elige palabras y números que tengan los mismos caracteres para hacerlo todavía más sencillo. Nosotros vamos a usar “Bigote” y 28921. El truco está en ir colocando las letras una a una, intercalando las cifras del número pero a la inversa. Así: “B1i2g9o8t2e”. Ya sabes lo que falta, ¿no? Un símbolo y asunto zanjado.

 

 

Gestores de Contraseñas

¿Se te siguen atragantando las nuevas contraseñas? ¿Son demasiado difíciles de recordar? Anotarlas en un papel es arriesgado y ponerlas en un documento digital, un regalo para cualquier hacker que acceda a tu ordenador. Pero existe una solución que elimina estos problemas de un plumazo: los gestores de contraseñas.

Son perfectamente seguros y su funcionamiento, más fácil que colorear con números: recuerdan todas tus contraseñas y te proponen nuevas. ¿Y cómo sabes que nadie va a entrar en esta app y a ver las que tienes guardadas? Bien fácil: porque se accede con la única contraseña que necesitarás recordar. Una clave maestra. Te garantizamos que nadie podrá acceder.

Además, los nuevos passwords que genera son imposibles de descodificar porque no están sujetas a ningún patrón personal. Los atacantes no solo son muy listos, sino que conocen todos estos métodos y dedican muchas, muchas horas a pensar en cómo averiguar tu contraseña. Pero ahora tienes la posibilidad de evitarles por completo.